El tema de la muerte para niños pequeños

Hablar de la muerte, ya lo hemos dicho antes, es un proceso complicado,  no encontramos las palabras adecuadas para decir lo que pasa en nuestro entorno sin generar dolor en aquellos a quienes amamos.

Sin embargo explicarle esto a un niño es más complicado ya que por su desarrollo cognitivo e inmadurez emocional, no asimilan la situación al igual que un adulto. Es difícil encontrar estrategias para manejar el tema de la muerte con los pequeños.

Es importante que los pequeños vivan el periodo cercano a la muerte cuando sabemos que esta se aproxima, por ejemplo si alguno de nuestros seres allegados padece una enfermedad que tendrá este fatal desenlace. Se puede llevar un duelo anticipado con los niños de forma que poco a poco se vayan preparando para el momento del adiós.

¿Qué tan consciente está el niño sobre la muerte?

Según la edad del pequeño es más fácil que conciba a la muerte con un significado completo. Los más pequeños (0 a 5 años) no tienen un concepto claro de la palabra así que lo sobrellevan con imaginación y metáforas espirituales como  “se durmió” “se fue al cielo” etc.

Los mayores (6 a 12 años) cuentan con más conciencia acerca del término, saben que la muerte es un proceso natural del cual “no se vuelve” con ellos hay que brindar mayor acompañamiento y comentar sus dudas e inquietudes acerca del tema.

¿Qué se recomienda para nuestros pequeños en estas situaciones?

Si es posible es bueno que el pequeño vea a su familiar, para que de esta forma pueda despedirse y cerrar ciclos.

Es importante que el niño tenga la posibilidad de expresar su emociones (ira, tristeza, frustración, etc). Se recomiendan actividades lúdicas(correr, gritar, pintar, etc.)

Deben de contar con redes de apoyo para sentirse protegidos y acompañados a cada instante, ya que se pueden sentir vulnerables de que algo les suceda a ellos.

Si después de estos consejos aún es difícil hablar con ellos, existen recursos como medios audiovisuales que te ayudarán a tratar este tema con los niños, así como especialistas en el manejo de duelo infantil.

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Escrito por: Cintia Rivas, Psicóloga

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