Los otros no solo ayudan a contener las emociones de alguien que sufre, tienen la función de ser testigos de la historia de lo que sucedió. Son la manera de que exista un registro de lo que hubo, lo que fue, y que ahora ya Read More
La aceptación es la última etapa del duelo y es cuando el doliente finalmente acepta la pérdida del ser querido, así como su ausencia.
Esta etapa es considerada una de las más difíciles para el doliente. Después de haber pasado por las fases anteriores, finalmente se está muy consciente de la pérdida y se siente una tristeza profunda.
En esta etapa se es consciente que ya no se puede seguir negando la pérdida, por lo que los sentimientos y emociones que se pudieron encontrar deprimidos durante la etapa anterior salen a relucir.
Ante un dolor tan grande el cuerpo reacciona tratando de negar lo ocurrido. Esto ayuda al organismo ya que experimentar un cambio de ánimo tan fuerte lo puede dañar.
El duelo, es un proceso natural, durante el cual, las personas aprendemos a vivir sin un ser querido. Es un proceso doloroso, a veces largo y con diferentes etapas.
Mucho se habla del duelo, ya sea por la pérdida de un ser querido, la pérdida de un bien material, algún cambio drástico en la vida o la dolorosa pérdida de una mascota.
Es común escuchar que los pensamientos positivos traen consigo experiencias positivas a nuestras vidas. Aunque muchas veces pasamos por situaciones tan difíciles que se hace muy complicado el poder ver el lado bueno de las cosas.
A lo largo de nuestra vida tenemos que enfrentar situaciones de duelo, ya sea por pérdida que vivimos nosotros mismos o por pérdidas que viven personas a nuestro alrededor, las cuales queremos mucho y queramos apoyar, pero quizá no sabemos cómo.
“El duelo es la pérdida de la relación, la pérdida del contacto con el otro, que rompe el contacto con uno mismo” Alberto Vargas.
