Cómo apoyar a un niño cuando mamá o papá no están presentes en fechas especiales

Cómo apoyar a un niño cuando mamá o papá no están presentes en fechas especiales

La muerte es transición, es cumplir con nuestra misión de vida, definitivamente es volver a casa. La vida, forma parte de nuestra realidad, no es nuestra casa, todo lo que tenemos aquí en la tierra, es prestado. Aun cuando creemos que nos pertenece, no es así, porque cuando nos vamos, no nos llevamos nada.Este es un concepto claro de comprender y de compartir con quienes nos rodean, principalmente con los más pequeños del hogar, con el fin de prepararlos para la muerte, ya que es un evento al que todos en algún momento nos enfrentamos.

Festividades sin mamá o papá

Las ideas de un niño sobre la muerte derivan de sus tradiciones familiares y de su relación con otros niños. Comienzan a preguntar sobre la muerte, cuando ven a un animal muerto y en ese momento hay que resolver todas sus dudas. Hay que decirle que todos vamos a morir algún día, que es una ley de la naturaleza y que es natural sentir pesar y deseo de volver a ver a la persona fallecida.

¿Que pasará ahora?

Recordemos que las respuestas ante el tema de la muerte tienen que ser simples y honestas.
La vida continua, el tiempo no se detiene y en ese avanzar, llegan esas fechas especiales, esos momentos en donde nos reunimos como familia para celebrar y brindar amor y compañía a nuestros seres queridos ¿Qué pasará ahora que no está papá? ¿que no está mamá? ¿que harán mis abuelitos…vendrá mi familia y compartirán conmigo? O acaso, pueden estar bailando y riendo en el ¿cielo? Muchas preguntas pueden pasar por la mente de un niño, generando un cúmulo de emociones ante las cuales lo único que desea es un abrazo, palabras de apoyo y afecto, que lo hagan sentir amado.

¿Qué hacer?

Con un buen trabajo psicológico y el esperado apoyo familiar, el niño puede elaborar el duelo más fácilmente que un adulto porque no tiene el prejuicio del “qué dirán” y es pura espontaneidad. Tiene menos sentimiento de culpa que el adulto y nunca se niega a rehacer su vida y ser feliz. Por eso, al llegar una fecha especial, es momento de honrar la memoria de aquellos seres a quienes amamos tanto y que nos acompañan con cada recuerdo de amor. Pongamos una fotografía en su memoria como parte de la actividad que se llevará a cabo. Si el niño o niña no desea tener este gesto, simplemente recordémosle con cuanto amor esperaba su ser querido esa fecha. Los preparativos que se tenían y lo feliz que eran compartiendo buenos momentos, ¡recordémosle que desde el cielo puede bailar y reír con nosotros!

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Escrito por: Patricia Pol, Psicóloga Clínica

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