Duelo y llanto
El llorar es una reacción fisiológica que nuestro cuerpo realiza desde que somos bebés. Sin embargo a lo largo de nuestra vida añadimos significados y valores afectivos a este proceso.
Un bebé llora porque es la única forma que tiene de comunicarse. Cuando tiene hambre, si está sucio, si tiene sueño, etc. Incluso hay quienes aseguran que los llantos del bebé se escuchan diferente correspondiendo de la demanda que tenga. Lo que sí es claro es que es un proceso natural del cuerpo para comunicarnos e incluso desahogarnos, ya que después de llorar nuestro cuerpo libera sustancias que nos permite descansar y relajarnos.
El llanto en adultos se asocia mas bien al dolor por la pérdida o frustraciones. Lloramos cuando algo nos duele, cuando algo nos molesta o incluso hasta por la alegría inmensa solemos llorar.
¿Pero por qué hay personas que no pueden llorar?
Existen personas que por más difícil sea el momento por el cual están pasando, no lloran (ni siquiera una lágrima).
La mayoría de las ocasiones son personas que guardan su sentir para soportar el momento en el que viven. Pueden pasar largo tiempo sufriendo y sin permitir que su cuerpo libere su sentir.
“Si tus ojos no lloran, llorará otro órgano de tu cuerpo”
¿Puede ser peligroso el no lograr externar nuestras emociones mediante el llanto?
La respuesta es sí. Hay muchas enfermedades que se relacionan con no expresar sentimientos. Todas las emociones en su mayoría negativas (dolor, frustración, coraje) necesitan salir de nuestro cuerpo, nosotros debemos permitirnos sentir y liberar llanto para poder seguir adelante.
¿Cuáles son los mitos relacionados con el llanto?
- Llorar es de débiles.
- El llanto es porque siente culpa.
- Los hombres no deben llorar.
- Llorando no se logra nada.
Tenemos que volver a lo básico. Si llorar es una función fisiológica del cuerpo meramente innata, ¿por qué tendríamos que reprimirla?
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Escrito por: Cintia Rivas, Psicóloga
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